El dispositivo vascular biorreabsorbible (BVS) de Abbott es un revolucionario dispositivo médico, que se inserta en el corazón, y que funciona como un stent pero con la ventaja de que se
disuelve con el tiempo
CLAVES DEL ESTUDIO
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Este estudio,
es la primera investigación clínica prospectiva, aleatorizada y controlada del mundo que ha comparado la seguridad y la eficacia del dispositivo vascular biorreabsorbible
de Abbott, con la familia líder del sector de stent liberadores de fármacos (DES) metálicos, desarrollada también por Abbott.
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La investigación clínica, ha sido desarrollada principalmente en Europa, e incluyó
a 501 pacientes con enfermedad coronaria, la forma más frecuente de enfermedad cardíaca.
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El estudio recoge datos de aproximadamente 1.500 pacientes tratados con el
dispositivo vascular biorreabsorbible procedentes de investigaciones de un solo brazo
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Los resultados se han presentado en una sesión de últimas novedades celebrada durante
el 26º Transcatheter Cardiovascular Therapeutics (TCT), el simposio científico
anual de la Cardiovascular Research Foundation, en Washington D.C., y se han publicado en
The Lancet.
PRINCIPALES CONCLUSIONES
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Los resultados a un año muestran que el
dispositivo vascular biorreabsorbible de Abbott proporciona unos
beneficios comparables respecto a diversas medidas, y unas tasas de angina (dolor en el pecho) inferiores que el mejor stent liberador de fármacos (DES).
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El objetivo primario de la investigación clínica ABSORB II es la motilidad del vaso a los tres años, momento en el que el
dispositivo vascular biorreabsorbible de Abbott se ha disuelto por completo.
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Sin un
stent permanente que enjaule el vaso, éste tiene el potencial de volver a un estado más natural. Los objetivos clínicos y las medidas de calidad de vida se valorarán anualmente durante tres años. Los objetivos de imagen, o las imágenes especializadas
del interior del vaso sanguíneo, se valorarán a los tres años
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