En la conferencia quedó puesto de manifiesto que Europa puede aprovechar las posibilidades a gran escala, de aumento de la creación de empleo en el sector del servicio de atención domiciliaria, en consonancia con el envejecimiento de su población, que continúa generando una demanda de más y mejores trabajos relacionados con la atención a largo plazo. A pesar del aumento del empleo en el sector, las difíciles condiciones de trabajo, unas capacidades inadecuadas y unos salarios bajos amenazan con ralentizar ulteriores avances.
El servicio de la atención domiciliaria fue uno de los pocos sectores en los que se observó un aumento de las cifras de empleo en los últimos cinco años, con un crecimiento próximo al 6 % durante el periodo 2008-2010, y del 2,6 % entre 2010 y 2012. En la actualidad hay más de 13 millones de personas empleadas en el sector de la atención sanitaria, y casi cinco millones de trabajadores en Europa que prestan servicios de atención domiciliaria.
Demografía y de empleo
«El sector de la atención a largo plazo ofrece vías para abordar los desafíos a los que se enfrenta Europa en materia demográfica y de empleo. Si actuamos correctamente, podremos ofrecer más y mejores empleos, al tiempo que mejoraremos la accesibilidad y la calidad de los servicios», afirma Juan Menéndez-Valdés, director de Eurofound. «En general", añade, "hay una tendencia creciente en la actualidad a utilizar más la atención comunitaria, con la promoción de una mayor independencia de las personas con limitaciones funcionales, de las preferencias de los usuarios y del potencial de la tecnología de vida cotidiana asistida».
De acuerdo con el informe, hay obstáculos para la creación de empleo en este sector, en especial, la escasez de candidatos y las restricciones presupuestarias, aunque también unas condiciones de trabajo exigentes. A largo plazo, el informe augura una mayor escasez, en particular, en relación con el personal mejor cualificado.
Atención sanitaria y social
El estudio de Eurofound analiza las iniciativas emprendidas en 10 Estados miembros de la UE, que concluyeron con éxito, bien en la creación de más puestos de trabajo relacionados con la prestación de atención social para adultos de la comunidad, bien en la mejora de la calidad de estos empleos, con el doble objetivo de realizar nuevas contrataciones y de retener al personal existente, además de mejorar la calidad del servicio.
Atraer a los jóvenes hacia el sector de la atención domiciliaria reviste especial importancia, según sostiene el informe, dado que puede ayudar a reducir las elevadas tasas de desempleo juvenil. También puede garantizar el reemplazo futuro de la mano de obra actual en este ámbito. Lo anterior es particularmente importante en los sectores de la atención sanitaria y social, en los que casi una tercera parte de los trabajadores tienen 50 años de edad o más. El aprendizaje profesional en los servicios de atención domiciliaria puede, asimismo, ayudar a los jóvenes que ni estudian ni trabajan en la actualidad a mejorar su situación.
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