Manual Básico de Neurología para Enfermería

La esclerosis múltiple es la enfermedad neurológica crónica más frecuente en adultos jóvenes en Europa y en Estados Unidos. En el Principado de Asturias están diagnosticados entre 750 y 800 pacientes, de los cuales cerca del 50% pertenecen al área de Gijón. “La edad media de inicio de la enfermedad se sitúa entre los 20 y 30 años, con el doble de mujeres afectadas que de hombres”, explica la Dra. Dulce Mª Solar, jefa de sección del Servicio de Neurología del Hospital de Cabueñes (Gijón). “Las cifras de incidencia se sitúan en los 3,7 casos por cada 100.000 habitantes, con una prevalencia de 65 casos por cada 100.000 habitantes”, añade.

“El mayor miedo ante un diagnóstico de esclerosis múltiple es el grado de discapacidad que puede ocasionar la enfermedad”, señala la Dra. Solar. “Es el temor a la silla de ruedas, a la dependencia”, añade la especialista, que insiste en que “el papel de enfermería es clave en todo este proceso”. “El apoyo va más allá del propio paciente de Neurología, puesto que las familias también necesitan ayuda, sobre todo psicológica”, comenta a su vez María Isabel Curto, enfermera del citado Servicio. “Las enfermedades neurológicas en general y la esclerosis múltiple en particular funcionan como una bola de billar; no sólo el paciente requiere de nuestra ayuda, sino que la necesitan también, y de forma directa, los familiares y cuidadores”, explica.

Justamente esa idea de “atención global al paciente neurológico, que incluye a su entorno familiar” es la que ha animado a la publicación del Manual Básico de Neurología para Enfermería, coordinado por María Isabel Curto, con prólogo de la Dra. Dulce Mª Solar, y editado con la colaboración de la compañía químico farmacéutica Merck.

Vigilantes de la adherencia

Fruto de la experiencia profesional y del empeño de María Isabel Curto, que trabaja día a día con enfermos neurológicos, el manual es un texto eminentemente práctico, destinado a todos los profesionales que se dedican al cuidado de estos pacientes.

“El enfermo neurológico necesita unos cuidados muy específicos y el apoyo que ofrecen los profesionales de la enfermería abarca a todo su entorno”, señala Curto. “Las familias se ven implicadas en el cuidado del enfermo, y una de sus mayores preocupaciones es saber cómo se las van a arreglar cuando lleguen de nuevo a casa. En ese sentido, el manual describe el apoyo global que puede ofrecer la enfermería”, añade.

Por su parte, Begoña Calleja, enfermera supervisora del mismo servicio, coincide al señalar la importancia del profesional de enfermería en el cuidado de los pacientes neurológicos. “En el caso de los pacientes con esclerosis múltiple, por ejemplo, estos suelen ser jóvenes, y además de las técnicas propias de enfermería que les enseñamos y del apoyo psicológico que les proporcionamos, pasamos a ser su referencia para solventar sus dudas, siempre de forma conjunta con el médico”, comenta Calleja.

“Es importante que, tanto pacientes como familiares y personas implicadas en el cuidado del enfermo sepan que pueden contar siempre con el apoyo del equipo de enfermería”, declara a su vez la Dra. Solar. “Solo trabajando en equipo se pueden conseguir buenos resultados”, termina diciendo.