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19 March 2013

La vacuna antineumocócica conjugada trecevalente, una herramienta eficaz para prevenir la infección por neumococo en pacientes con afecciones respiratorias


La vacuna antineumocócica conjugada trecevalente es una herramienta eficaz para prevenir la infección por neumococo en sujetos con afecciones respiratorias. Y es que entre las infecciones más frecuentes causadas por la bacteria Streptococcus pneumoniae, también conocida como neumococo, se encuentra la neumonía. Las formas más graves de la infección neumocócica ocurren cuando el neumococo afecta a líquidos corporales, habitualmente estériles, como la sangre o el líquido pleural; lo que se denomina como enfermedad neumocócica invasiva, y de ella la forma más frecuente es la neumonía. “Los factores de riesgo más habituales asociados a la neumonía son las enfermedades crónicas o la insuficiencia cardiaca. Sin embargo, otras patologías no tan intrínsecas al enfermo, como el alcoholismo o el tabaquismo aumentan considerablemente las probabilidades de padecer esta enfermedad infecciosa. Además, haber padecido recientemente una infección respiratoria en la vía alta o incluso las aspiraciones que se realizan al dormir, especialmente en las personas mayores, favorecen el paso de gérmenes desde la cavidad orofaríngea al árbol bronquial y, con ello, la neumonía”, afirma el doctor Jordi Almirall, médico adjunto de Medicina Intensiva en el Hospital de Mataró, durante la XX edición de la jornada “24 Horas Neumológicas en Stiges”.

La enfermedad neumocócica invasiva puede afectar a personas de cualquier edad. Sin embargo, tal y como comenta el doctor Antoni Torres, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos Respiratorios del Hospital Clinic de Barcelona, “los niños hasta los cinco años de edad y los adultos a partir de 65 años son los grupos de población más susceptibles de padecer enfermedad neumocócica invasiva. Además, no podemos olvidar a los adultos a partir de los 50 años ya que, desde esta edad, el riesgo comienza incrementar, según demuestran varios estudios epidemiológicos. Para todos ellos, la protección frente al neumococo es especialmente importante”.

 Los especialistas afirman que la vacunación antineumocócica es la medida más eficaz para prevenir la enfermedad neumocócica invasiva e insisten en la necesidad de vacunar especialmente a los adultos con factores de riesgo, como la enfermedad respiratoria crónica (EPOC, asma….), ya que en ellos la enfermedad neumocócica se presenta de manera más agresiva y en forma de neumonía en el 80% de los casos. De hecho, aunque la incidencia de la enfermedad neumocócica es mayor en niños, las complicaciones y la mortalidad son más frecuentes en adultos, especialmente a partir de los 50 años de edad y en los afectados por enfermedades crónicas o inmunodepresión. El doctor Almirall afirma que “es importante aumentar la información sobre la vacuna conjugada trecevalente desde todas las unidades y concienciar también a la población de la importancia de vacunarse contra el neumococo, no solo para prevenir enfermedades infecciosas sino también otras complicaciones de patologías crónicas que no estén en activo. Además, junto a la vacuna del neumococo, es recomendable aplicar la vacuna de la gripe, especialmente durante el invierno, ya que ambas tienen un efecto sumatorio que permite prevenir la neumonía”.

La vacunación con la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente está especialmente recomendada en pacientes con determinadas condiciones médicas subyacentes como enfermedades respiratorias crónicas (como EPOC o asma), enfermedades crónicas hepáticas, cardiacas, insuficiencia renal crónica, diabetes, u otras indicaciones como el tabaquismo o el alcoholismo, así como en pacientes con inmunodeficiencias primarias o secundarias (como VIH/SIDA, enfermedades autoinmunes o tratamiento quimioterápico o inmunosupresor).

Para estos grupos en general, y para los sujetos sin factores de riesgo, se recomienda la administración de una dosis de la vacuna conjugada trecevalente. En el caso de determinados pacientes que presenten un riesgo más elevado, como los inmunodeprimidos, los expertos recomiendan complementar la vacuna conjugada trecevalente con la vacuna polisacárida veintitresvalente. Ante esto, el doctor Torres afirma que “en determinados pacientes con mucho riesgo es recomendable administrar ambas vacunas para garantizar una mayor cobertura de serotipos”.

Este especialista afirma que “para cualquier grupo de población la prevención es la mejor herramienta ante la enfermedad neumocócica y ante las afecciones respiratoriasPara ello, además de vacunarse contra el neumococo, dejar de fumar, reducir el consumo de alcohol a niveles muy moderados, evitar el contacto de personas mayores con niños que padezcan una infección respiratoria activa, mantener una óptima higiene dental y vacunarse contra la gripe son los primeros pasos a seguir para cuidar nuestra salud”.

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