El paulatino abandono de la Dieta Mediterránea en los últimos años provoca que cada vez se ingieran menos nutrientes esenciales para el organismo. Prueba de ello es que los malagueños no consumen los 500mg mínimos de ácidos grasos omega-3 recomendados por los especialistas, según se ha puesto de manifiesto en la conferencia de Om3gafort “Los ácidos grasos omega-3: más allá de la prevención cardiovascular”.
Marta Anguera, nutricionista y profesora de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Ramon Llull y Manuel León Ortega, farmacéutico han sido los ponentes de esta conferencia celebrada hoy en el marco del Congreso CEDINTIA.
Según Anguera, “el consumo diario de ácidos grasos omega-3 entre la población malagueña no alcanza los 500mg mínimos recomendados por la mayoría de sociedades científicas”.
El omega-3, un buen aliado para la prevención
Los ácidos grasos omega-3 son un tipo de grasa insaturada que el organismo humano no puede fabricar a partir de otras grasas, por este motivo, al igual que los ácidos grasos omega 6 se deberían tomar diariamente en la alimentación.
La nutricionista ha señalado que en los últimos años se ha observado un aumento en el nivel de consumo de omega 6 frente al omega-3. La realidad es que “se consumen 25 veces más omega-6 que omega-3, cuando la proporción equilibrada debería ser de 5 a 1”, ha señalado. “Una dieta sana combinada con complementos alimenticos que aporten los ácidos grasos omega-3 que el organismo necesita puede devolvernos ese equilibrio”, ha añadido.
Los estudios señalan que los ácidos grasos omega-3 son muy recomendables para prevenir problemas cardiovasculares, para ayudar a disminuir la inflamación; pero también para mejorar la capacidad de concentración, para proteger los ojos (la mácula) del envejecimiento y para mantener una buena hidratación cutánea y ocular cuando con la edad la lágrima es de peor calidad así como para proteger el sistema inmunitario.
La importancia del farmacéutico
Para León, el profesional de la oficina de farmacia tiene una tarea importante de información al paciente. “Andalucía, por ejemplo, es la CC.AA con la tasa de enfermedad cardiovascular más alta de España y en cambio, se desconoce el efecto que el omega-3 puede tener en su prevención”.
Por eso es necesario que además de llevar una dieta sana y equilibrada “médicos, nutricionistas y farmacéuticos trabajemos de la mano para recomendar aquellos complementos alimenticios que aporten la cantidad de ácidos grasos omega-3 que el organismo necesita”.
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