La Asociación de Padres de Niños Prematuros (APREM) ha celebrado hoy, en el Hospital Gregorio Marañón, el Día Mundial de la Prematuridad. Se trata de una iniciativa internacional promovida por EFCNI (Fundación Europea para el Cuidado de los Recién Nacidos Prematuros, European Foundation for the Care of Newborn Infants, por sus siglas en inglés), bajo el lema “En el mundo, 1 de cada 10 niños nace prematuro”, que las distintas asociaciones de nuestro país y del extranjero acogen, con el objetivo principal de elevar los estándares en los cuidados de los bebés prematuros, además de concienciar a la sociedad sobre los problemas y riesgos que implican este tipo de nacimientos. Para la celebración de este acto, APREM ha contado con la colaboración de entidades como: Abbott, Dräger, Coca-Cola, Nestlé, SEN, EFCNI, UENPS, Fundación Real Madrid y Farmaindustria.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año nacen 15 millones de bebés prematuros en el mundo, dato que implica que uno de cada diez bebés nacidos en el mundo es prematuro. Sólo en Europa, 500.000 bebés nacen prematuros cada año.
Ramona Pozuelo, presidenta de APREM, explica que, “en España, la tasa de nacimientos prematuros ha aumentado en un 48% desde 1996 y actualmente, el número de bebés prematuros llega a representar más de 31.000 nacimientos en nuestro país[ii]. Debido a este significativo incremento, es importante que los padres, las familias y la sociedad estén concienciados acerca de las necesidades de estos bebés y de su vulnerabilidad ante las infecciones, para que puedan así aprender a protegerlos con la ayuda de expertos y asociaciones, ya que los bebés prematuros necesitan unos cuidados especiales desde el momento de su nacimiento, tanto en el hospital como cuando llega el momento de volver a casa con el recién nacido”.
El Día Mundial de la Prematuridad con APREM
Familias, niños, socios de APREM y especialistas en neonatología se han reunido durante esta mañana en el Hospital Materno-Infantil Gregorio Marañón de Madrid, para celebrar por segundo año consecutivo el Día Mundial de la Prematuridad, con el objetivo de concienciar sobre la importancia de los cuidados neonatales, de la protección de los prematuros ante las infecciones respiratorias y sobre las medidas preventivas que debemos observar para proteger la salud y el desarrollo de los niños más vulnerables.
El acto representativo de celebración ha girado en torno a una cuerda de ropa con diferentes calcetines de niños prematuros y nacidos a término que ha sido colgada en el recinto del hospital. El ex jugador de baloncesto Juanma López Iturriaga, también padre de un niño prematuro, ha participado y ayudado a colgar el último calcetín en la cuerda, en representación de uno de los bebés a los que se ha dado el alta en neonatología durante esta misma mañana. Según Juanma López Iturriaga, “este tipo de actos dan a niños y padres ánimos y fuerza para seguir adelante en situaciones tan difíciles como es afrontar un nacimiento prematuro”.
Durante el acto, varios niños han sido los encargados de leer la traducción del “Call to action”, o Llamada a la acción por la salud del recién nacido, presentados en noviembre del 2011 en el Parlamento europeo a través de la EFCNI. Además, se han desarrollado otras actividades de carácter lúdico dedicadas a pequeños y mayores, como la actuación del mago Alfonso V, juegos infantiles, una pachanga de baloncesto, un rocódromo hinchable y, al final, una emotiva suelta de globos por todos los niños prematuros del mundo.
Bebés prematuros: población de riesgo ante las infecciones
Los bebés prematuros, nacidos antes de la semana 37 de gestación, representan un problema de salud perinatal muy importante en el mundo, ya que cada año aumentan más las tasas de prematuridad en el mundo, principalmente en los países desarrollados y en los países en vías de desarrollo y ésta es la segunda causa de mortalidad en niños menores de 5 años en el mundo.
Estos bebés, a causa de haber nacido antes de tiempo, carecen de un desarrollo completo de sus órganos y sistemas, lo que los hace más vulnerables a los virus, principalmente a los que causan las infecciones respiratorias agudas (IRA), como la neumonía, la bronquiolitis o la gripe. Por ser unos de los principales representantes de las poblaciones de riesgo ante estas infecciones, es necesario para estos bebés contar con la ayuda y el apoyo de sus padres, familiares, especialistas y enfermeras, además del soporte del sistema sanitario para que consigan salir adelante y desarrollarse como cualquier otro niño de su edad.
El doctor Vicente Pérez Sheriff, jefe del servicio de neonatología del Hospital Materno Infantil Gregorio Marañón de Madrid, indica que, “junto con los lactantes, los niños con síndrome de Down, los bebés con cardiopatías congénitas y otros bebés de riesgo, los prematuros son vulnerables ante todo tipo de infecciones y se deben tomar una serie de sencillas medidas higiénicas, como el lavado de manos, evitar el humo del tabaco o evitar los ambientes cerrados y potencialmente contagiosos, además de unas medidas profilácticas que serán indicadas por el médico en caso de necesidad”.
Recortes Sanitarios en la población pediátrica: el compromiso de APREM con la salud de los más vulnerables
Recientemente, asociaciones de padres y pacientes españolas, han unido sus fuerzas con el fin de evitar los recortes en sanidad que pueden comprometer la salud de los niños más vulnerables.
En el caso de los bebés prematuros, las medidas sanitarias de recortes hacen que la salud de éstos se pueda ver comprometida, ya que necesitan unos cuidados neonatales especiales y de calidad, que pueden verse afectados por la falta de atención y por las restricciones en el acceso a los tratamientos más necesarios. Cuando se trata de infecciones respiratorias, tales como la bronquiolitis, los especialistas recomiendan la aplicación de medidas profilácticas que combaten el VRS con anticuerpos, que constituyen la base de la prevención y evitan así el contagio y el consiguiente ingreso hospitalario o ventilación mecánica que entrañarían en sí mismos unos costes mucho más elevados.
Es por ello que las asociaciones de pacientes han unido sus esfuerzos para hacer una llamada de atención sobre los potenciales efectos que las medidas de ahorro pueden tener en la salud de los más pequeños y han solicitado que no se limite a los profesionales sanitarios en el acceso a medidas eficaces y recomendadas, tanto por las sociedades médicas de nuestro país, como por el Ministerio de Sanidad, en las guías de práctica clínica existentes.
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