Los planes del Gobierno para reducir la deuda de las Administraciones son bien acogidos por la patronal del sector de tecnologías sanitarias (Fenin), el proveedor de materiales que van desde las tiritas a los escáneres. O, al menos, aprecian el interés mostrado y que haya propuestas, como dar créditos a los Ejecutivos autonómicos, para que paguen.
Pero hay un punto que no les gusta nada. En una nota, señala que “se ha de señalar expresamente la negatividad de un concepto como la opción de quitas para las empresas, que sería gravemente distorsionador para los mercados, y que pondría en duda la credibilidad de nuestro país en los mercados extranjeros, y con ello dañaría gravemente la marca España”.
El sector es el segundo acreedor de las comunidades, después de los laboratorios que venden directamente sus medicamentos a los hospitales de la sanidad pública. El importe de la deuda a finales de 2011 era de 5.230 millones de euros, con una demora media en los pagos de 473 días, 126 más que en 2010.
La idea de las quitas no se ha establecido todavía para los proveedores de las comunidades, pero sí estaba incluida en el plan para pagar la deuda de los Ayuntamientos. Por eso los principales acreedores recelan de que se les aplique una medida similar. Fuentes del sector de los laboratorios coinciden con los recelos de Fenin, aunque oficialmente la postura es esperar a conocer el plan concreto de pago.
En cambio, Fenin aprueba otra de las propuestas: que el estado avale la deuda de las comunidades. De hecho, esta propuesta también fue barajada por Farmaindustria como una medida de solucionar el impago del sector (en su caso, 6.400 millones con una demora de 525 días).
También va en esta línea la propuesta para las oficinas de farmacia (unos 2.000 millones de deuda).
**Publicado en "EL PAIS"
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