El 70% del sistema inmune se encuentra en el intestino. Así, los alimentos ingeridos en nuestra dieta pueden ejercer cierta agresión en el intestino y sobre nuestra flora intestinal. Nuestra flora bacteriana en el intestino grueso fermenta sustancias procedentes de la alimentación produciendo sustancias beneficiosas para nuestra salud. La microflora interviene en el desarrollo del sistema inmunológico y en nuestra respuesta hacia los patógenos. Y también participa en la digestión y en la producción de vitaminas.
Los probióticos ingeridos como alimento o como complemento alimenticio actúan estabilizando la composición de la flora bacteriana, mejorando y activando las defensas. Además de ayudar la digestión.
**Datos facilitados por Pearlslife.eu
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