Más de la mitad de las personas que padecen asma no están controladas, pero sólo el 7% es consciente de ello, según el Estudio Magic, patrocinado por MSD, en el que han participado 180 centros y 1.286 pacientes asmáticos españoles. Los resultados de esta investigación se han presentado hoy en el XXVII Congreso de la SEAIC (Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica), que se celebra estos días en Madrid. "Hemos detectado una discordancia llamativa respecto a lo que piensan los pacientes de la situación de control de su asma y la realidad, que es prácticamente inversa", ha explicado Jose María Olaguíbel, del Servicio de Alergología del Complejo Hospitalario de Navarra, presidente de la SEAIC e investigador principal del estudio. El doctor ha señalado que tanto los pacientes como los médicos tienden a sobrevalorar el grado de control de esta patología respiratoria, por lo que se hace necesario utilizar medidas objetivas de vigilancia.
Santiago Quirce, jefe del Servicio de Alergología del Hospital La Paz de Madrid, ha explicado que el estudio revela que sólo el 16,1% de los médicos considera que el asma de sus pacientes no está controlada, cuando la realidad es que la cifra asciende a más del doble. Esto se debe principalmente al carácter crónico de la enfermedad, que hace que el paciente "vaya adecuando su vida a esa realidad y considere normal lo que no lo es", según Olaguíbel y, por otro lado, a la falta de un adecuado seguimiento de los asmáticos que, frecuentemente, recurren de forma excesiva al autocontrol. Quirce ha dicho que una pésima atención a esta dolencia repercute muy negativamente en la calidad de vida de los pacientes, tanto por los síntomas diarios como por las exacerbaciones, el temor y ansiedad que causan y el riesgo futuro que tiene esta situación. Para el doctor, aspectos como la educación en el manejo y tratamiento del trastorno, la colaboración activa entre pacientes y médicos, la definición de una estrategia para lograr objetivos comunes y la utilización racional y progresiva de los fármacos para el asma, pueden ayudar a combatirlo.
El Estudio Magic constata además la relación del mal control del asma con patologías como la rinitis, una enfermedad que sufren entre el 70 y el 90% de los pacientes asmáticos y cuya gravedad está en relación con su afección mal tratada. Se observa también una relación entre la obesidad y la ausencia de control de esta patología, porque a mayor IMC (Índice de Masa Corporal) peor es el abordaje de la enfermedad respiratoria. En personas con un IMC normal (menos de 25) el asma no controlada es de 48%, mientras que asciende al 61% en quienes tienen un IMC mayor de 30. En cuanto al tabaquismo, Olaguíbel ha destacado que es otro factor independiente que hace que el asma se agrave. "Hay que luchar más contra esta epidemia", ha aseverado. El doctor ha explicado que existe una relación no solo cualitativa, sino cuantitativa porque a medida que el paciente consume más cigarrillos, las posibilidades de tener un asma descontrolada son mucho mayores.
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